Veo que me suceden cosas día a día y sin embargo no me doy cuenta y se me pasa el tiempo volando. Llevaba mucho tiempo queriendo hacer una entrada para el blog, pero cada vez que me sucedía algo decidía dejarlo para mas tarde o simplemente cuando me sentaba para escribirlo ya se me había olvidado. Llevo un ritmo frenético que me es difícil de soportar, pero me han pasado tantas cosas en tan poco tiempo que tenía que hacer la entrada ya.
Mi padre parece haber olvidado ya que renuncio a toda creencia y sigue todavía insistiendo. Aún así eso es de lo que menos me preocupa ahora o por lo menos no le doy gran importancia. Durante este tiempo que he vivido al lado de Cris, siento que mi vida es muy diferente. Ahora no tengo que temer el qué dirán o qué pensarán, ahora me he dado cuenta de que mi vida es más interesante y que hay cierto toque de riesgo que le da emoción.
Sin embargo, aún queda una extraña preocupación y un gran pesimismo que cae sobre mi persona cada vez que pienso "hoy no he sido lo bastante bueno para ella". Me deprime pensar que no llego más allá, y que en verdad sí que tengo capacidad para mucho más. No consigo saber si debo esforzarme más o si tal vez debería dejarme hacer y no forzar la cuerda.
Aunque sé que no puedo hacer más, siento una terrible decepción conmigo mismo cada vez que nos encontramos con algo que le gusta en un escaparate. Soy una triste persona sin dinero en medio de este mundo que parece escupirme desde cada uno de sus lados, esquinas y rincones. Y aún así, ahí esta ella, a mi lado.
Si pudiera decir con palabras lo mucho que te amo... si al menos pudiera mostrar de alguna manera que sin ti no soy nada... si te hubiera dicho alguna vez que te admiro por todo lo que haces... por mi.
Cierto es que yo no tenía ninguna posibilidad de ser el rey en el instituto, pero tú no necesitas ser reina de ningún ridículo colegio, porque ya eres reina de mi corazón.
No voy a acabar esta entrada con un "te quiero", porque toda esta entrada es un enorme "TE AMO". No llego a comprender el porqué de mi vida, pero mientras estés a mi lado nada me hará despreciar tanto mi vida como para quitármela.
Y aún así me siento inútil cada vez que me pides algo y no soy capaz de hacerlo. Cuando voy a tu casa para ayudarte con algún trabajo y lo único que hago es mirar, me siento ruin y despreciable porque no soy capaz de ayudar. Inútil, y aún así me dices que me quieres. Yo me siento querido a pesar de ser como un viejo aparato oxidado y estropeado que ya no tiene función salvo la de ocupar un hueco en este mundo.
Solo quiero pasar más tiempo a tu lado. Solo a tu lado soy feliz.
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